El día 14 de mayo de 1975, durante el registro de un piso franco que ETA tenía en Gernika, resultaron muertos el teniente de la guardia civil Domingo Sánchez Muñoz y los etarras Iñaki Garay Lejarreta y Blanca Salegui Allende. Desde las cuatro de la madrugada del miércoles 14 de mayo comenzó un despliegue de la Guardia Civil en una zona verde bordeada por los bloques de las conocidas popularmente como “casas del Estado” con el fin de proceder al registro de un “piso franco” de ETA en el número 47 de la calle señorío de Vizcaya. Hacia las seis de la mañana los miembros de la Guardia Civil penetraron en el portal para proceder a un registro, dirigiéndose al piso franco situado en la planta baja, llamaron a la puerta y abriendo el matrimonio formado por Iñaki Garay Legarreta y su esposa Blanca Salegi Allende; los guardias les preguntaron si había alguna persona más en el piso y respondieron que “dos chicos”. En ese momento se produjo un tiroteo en la calle, concretamente junto a una ventana del piso a través del cual salían los dos jóvenes a los que había hecho referencia el matrimonio; frente a la ventana por la que los dos etarras pretendían huir, se encontraba el teniente de la Guardia Civil Domingo Sánchez Muñoz, que dio el alto a los dos jóvenes, siendo respondido con disparos por parte de los miembros del comando, ocasionándole dos heridas mortales. Seguidamente se inició un tiroteo en el piso. Ambos tiroteos se prolongaron durante media hora, tras la que los etarras que pretendían huir por la ventana resultaron heridos e Iñaki y Blanca muertos. Uno de los etarras heridos, Jesús María Markiegi Aiastui,"Motriko", huyó hacia el monte, hacia la vecina localidad de Ajanguiz, donde fue encontrado en el interior de una chabola pasadas las ocho de la mañana, originándose un nuevo tiroteo donde resultó muerto.
Descansen en paz. ++++
Con este Blog lo único que pretendemos es tener en mente a todas y cada una de las personas que han muerto como consecuencia de acciones terroristas, sin entrar en polémicas sobre sus pasados ni posibles justificaciones, partiendo de la premisa que NINGUNA justificación está por encima de la vida de una persona. El trabajo es laborioso, y nos cuesta mucho recorrer todo el mapa para hacer las fotos, pero creemos que no podemos olvidar a NINGUNA de las víctimas de esta sinrazón.
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