El 2 de noviembre de 1986, Genaro García de Andoain, delegado para Asuntos del Interior de la Ertzantza, resultaba muerto a primera hora de la tarde en las estribaciones del monte Gorbea cuando una unidad especial del mismo cuerpo, que él encabezaba, hizo frente a los tres terroristas que tenían secuestrado desde hacía 18 días, al industrial vitoriano Lucio Aguinagalde, que fue liberado sano y salvo. Genaro García de Andoain, tenía el mando operativo de la policía autonómica vasca y era el responsable del grupo especial Ekintza, embrión de la futura brigada criminal del cuerpo y encargado de la lucha antiterrorista. La liberación de Lucio Aguinagalde por la policía autonómica vasca se produjo hacia las tres de la tarde. La Ertzantza había detenido por la mañana a un joven armado, que aseguraba estar cogiendo setas en las proximidades de una cueva situada en las estribaciones del monte Gorbea, cerca del municipio de Ubidea (Bizkaia). Esta cueva era vigilada por los ertzainas por tener sospechas de que era la cárcel del pueblo en la que se encontraba el secuestrado. Los ertzainas, de paisano, armados y sin chalecos antibalas, rodearon la cueva, se identificaron a gritos y pidieron a los secuestradores que se entregaran. Uno de los etarras salió con una metralleta y otro con una pistola. En el tiroteo resultó muerto Genaro García de Andoain, mientras uno de los secuestradores, José María Gabilondo Agote, recibía cinco balazos. El otro terrorista logró huir herido. Lucio Aguinagalde fue liberado sin que sufriera daño alguno en la refriega y en buen estado de salud. RIP +
En 1989 la Audiencia Nacional condenó a Juan María Gabirondo Agote "Chispas" y a Francisco Cabello Pérez"Patxi", miembros del comando Araba de ETA, a 29 años de prisión por un delito de atentado con resultado de muerte. También fueron juzgados los colaboradores en el secuestro de Aguinagalde: Juan Ramón González Mendizábal "Juanrra", Garbine Ibarguchi Larrinoa y Juan Manuel Vélez Bilbao.
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