El 5 de agosto de 1983 ETA asesinaba en la localidad guipuzcoana de Oyarzun al policía municipal de San Sebastián Manuel Peronié Díez. Manuel Peronié y su amigo Víctor Zabala habían estado cenando y disfrutando de las fiestas patronales en la localidad de Oyarzun. Pasaban las 03:15 de la madrugada cuando los dos amigos se encontraban cerca de la plaza de San Esteban y se disponían a montar en el vehículo de Manuel para regresar a casa cuando fueron abordados pistola en mano por tres etarras del comando Donosti. Los dos amigos fueron encañonados y obligados a permanecer sentados en el bordillo de la carretera que comunica Oiartzun con Errenteria, a la espera de que un cuarto terrorista trajese el vehículo que iban a utilizar para secuestrarlos. En un momento dado Manuel y Víctor trataron de huir corriendo mientras pedían auxilio a gritos; uno de los etarras abrió fuego contra ellos alcanzando a Manuel en el torso y en la ingle. Víctor consiguió huir carretera abajo perseguido de cerca por uno de los terroristas que descargó el cargador de su pistola contra él, dejándole herido; estas balas sueltas también alcanzaron a una pareja de jóvenes, Coro e Íñigo, que pasaban en una moto cerca del lugar de los hechos. Posteriormente efectivos de la Cruz Roja recogieron el cuerpo sin vida de Manuel Peronié y trasladaron a los dos jóvenes heridos a la Residencia Nuestra Señora de Aránzazu de San Sebastián. Víctor Zabala, era el delegado de ventas de la empresa Rank-Xerox en San Sebastián y Manuel Peronié era policía municipal de Donostia – San Sebastián. Los etarras Jesús María Zabarte Arregui y Juan José Iradi Lizarazu fueron condenados a 29 años de reclusión mayor por el asesinato de Manuel Peronié, así como a otros 15 años de reclusión menor por el asesinato frustrado de Víctor Zabala. Descanse en paz. +
Con este Blog lo único que pretendemos es tener en mente a todas y cada una de las personas que han muerto como consecuencia de acciones terroristas, sin entrar en polémicas sobre sus pasados ni posibles justificaciones, partiendo de la premisa que NINGUNA justificación está por encima de la vida de una persona. El trabajo es laborioso, y nos cuesta mucho recorrer todo el mapa para hacer las fotos, pero creemos que no podemos olvidar a NINGUNA de las víctimas de esta sinrazón.
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