Ana Isabel Arostegi Legarreta y Francisco Javier Mijangos Martínez de Bujo

En la tarde del viernes 23 de noviembre de 2001 ETA asesinaba a tiros a los agentes de la Ertzaintza Ana Isabel Arostegi Legarreta y Francisco Javier Mijangos Martínez de Bujo cuando regulaban el tráfico en la localidad guipuzcoana de Beasain. El cruce de Zaldizurrieta era un punto muy conflictivo en cuanto a la circulación, punto principal de acceso a la localidad, especialmente los viernes por la tarde. Los dos ertzainas, adscritos a la comisaría de Beasain situada a apenas 200 m. del lugar del atentado, hacía apenas cinco minutos que regulaban el tráfico en dicho cruce, tras haber relevado a otra pareja de la Ertzaintza en una labor que se realizaba a diario para agilizar el tráfico. A las 19:15 de la tarde dos miembros de un comando de ETA, un hombre y una mujer, se acercaron en un coche a las proximidades del cruce, bajaron del mismo y acribillaron a balazos a bocajarro a los dos agentes de la Ertzaintza, a los que sorprendieron por la espalda. Ana Isabel Arostegi intentó defenderse del ataque, pero fue rematada por la etarra cuando yacía malherida en el suelo. Los restos mortales de la ertzaina fueron trasladados al Instituto Anatómico Forense del cementerio de Polloe de San Sebastián. Francisco Javier Mijangos, gravemente herido, fue llevado a la Clínica de la Asunción de Tolosa, donde ingresó en estado de coma, con una bala en la cabeza, pero falleció poco después, hacia las 21:00 horas.

El asesinato de Ana Isabel y Francisco Javier se produjo tres días después de que la banda terrorista ETA intentase asesinar a otros dos agentes de la Ertzaintza, mediante la colocación de una bomba-trampa junto a una pancarta en el parque bilbaíno de Etxebarría en la que se podía leer "Policía asesina. ETA mátalos". La Ertzaintza se había convertido en un objetivo prioritario de la banda terrorista, como se recogía en un “Zutabe” de pocos meses antes, donde ETA incluía a la Policía Autonómica como objetivo en un análisis titulado "Debate cipayos".

Ana Isabel estaba casada, era madre de tres hijos de corta edad y se convirtió en la primera mujer agente de la Ertzaintza víctima de la banda. Francisco Javier estaba casado y tenía un hijo de diez meses. Descansen en paz. ++

Los asesinos de los dos ertzainas fueron Imanol Miner Villanueva, que disparó contra Francisco Javier Mijangos, y Ainhoa García Montero “Laia” que tiroteó y remató en el suelo a Ana Isabel Arostegi.