El día 12 de noviembre de 1979 ETA asesinaba al guarda forestal y corresponsal en el periódico El Diario Vasco Fernando Rodríguez Espínola en el interior de un bar de la localidad guipuzcoana de Oiartzun. Eran las 12:45 del mediodía cuando dos individuos se situaron en el umbral de la puerta del local, que estaba muy concurrido, y sin mediar palabra le apuntaron a la cabeza y dispararon contra él a muy poca distancia. Fernando fue alcanzado por un disparo en la cabeza y varios más en el cuerpo, falleciendo prácticamente en el acto. Sus asesinos se montaron en un vehículo aparcado frente al bar, en el que esperaban otros dos terroristas, y emprendieron la huida; el vehículo utilizado, un Seat 124, había sido robado a punta de pistola esa misma mañana en la explanada del hipermercado Mamut y su dueño fue atado con cadenas a un árbol en un bosque cercano. La Guardia Civil recogió posteriormente siete casquillos de bala del calibre 9 mm. Parabellum. Los vecinos del pueblo conocían la ideología de derechas de Fernando y ETA militar justificó su asesinato acusándole de ser confidente de la Guardia Civil. Lo mismo hicieron con su amigo, el taxista Ignacio Arocena Arbelaiz, que sería asesinado poco después, el 15 de febrero de 1980. Descanse en paz. +
Con este Blog lo único que pretendemos es tener en mente a todas y cada una de las personas que han muerto como consecuencia de acciones terroristas, sin entrar en polémicas sobre sus pasados ni posibles justificaciones, partiendo de la premisa que NINGUNA justificación está por encima de la vida de una persona. El trabajo es laborioso, y nos cuesta mucho recorrer todo el mapa para hacer las fotos, pero creemos que no podemos olvidar a NINGUNA de las víctimas de esta sinrazón.
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